
“Aquellos que fueron celebrados en otros tiempos, no son, en cierto sentido hoy, más que vocablos caducos”
Marco Aurelio, Meditaciones, IV, p. 45
RAÚL NATHÁN PÉREZ
1).- Aide memoire para novatos
Para Roderic Ai Camp, académico y estudioso del fenómeno político en México, toda política es local. En una de sus obras: Metamorfosis del líderazgo en el México contemporáneo, FCE, 2012, advierte que, para acceder a un cargo estatal importante, como la gubernatura por ejemplo, es –o era- menester haber hecho talacha en cargos estatales. Eso no aplica en Oaxaca. Todo lo anterior, obvio, requiere un análisis. Aquí sólo es un pincelazo descriptivo. Un poquito de historia. Veamos: Heladio Ramírez (HRL), Diódoro Carrasco (DCA), José Murat (JMC), Ulises Ruiz (URO), Gabino Cué (GCM) y Salomón Jara (SJC), nos llegaron del Senado.
La excepción fue Alejandro Murat (AMH), que vino del gabinete de Enrique Peña Nieto. Del INFONAVIT para ser exactos. Fue además, el único no oriundo de Oaxaca. Nació en el Estado de México. Su arribo fue motivo de reforma constitucional para reconocer el ius sanguinis (derecho de sangre) por línea paterna. Los operadores legislativos de esa movida están hoy en Morena o en el PVEM.
El resto, nativos oaxaqueños. HRL nació en Santa María Ayú, distrito de Huajuapan; DCA en Cuicatlán; JMC en Ixtepec; URO en Chalcatongo de Hidalgo; GCM en Oaxaca de Juárez y SJC en San Melchor Betaza. Heladio tuvo trayectoria en cargos de elección popular por el PRI. Diódoro no. Entró al Senado sin tocar baranda. Fue poderoso Secretario en el gobierno de Heladio. Murat Casab fue diputado federal y senador previo a la gubernatura. En su primera campaña omitió el segundo apellido. Lo cambió por “Casas”.
2).- Un recuento sucesorio
Ulises tuvo experiencia legislativa en la Cámara Baja y el Senado. Reconocido por sus habilidades. Experto operador de alquimia electoral. Gabino fue funcionario en la CDMX, en Oaxaca, y luego subsecretario en la SEGOB. En 2001 ganó la presidencia municipal de la capital, antes de llegar al Senado. Después a la gubernatura en 2010. Salomón ha tenido, asimismo, experiencia en labores legislativas y en el gobierno de Cué, como titular de la SEDAPA. Al menos dos incursiones al Senado. Es decir, de los mencionados, todos se foguearon, incluso el Cachorro Murat, que fue legislador y funcionario federal y estatal.
En formación académica, al menos 4 son abogados, 3 de ellos egresados de la UNAM: HRL, JMC y URO. DCA es economista y AMH, estudió Derecho y Relaciones Internacionales. Ambos se formaron en el ITAM. El segundo con maestría en Columbia University. GCM es economista por el ITESM y Jara ingeniero del IPN. Es decir, a diferencia de quienes que hoy se disputan la sucesión o se dan de codazos en el gabinete o levantan la mano en las cámaras, hay más tablas.
3).- Jalones y tirones
HRL planchó su sucesión sin problemas. DCA fue su delfín y llegó en 1992. Heladio jamás influyó ni impuso funcionarios ni se apareció en Oaxaca. Diódoro gobernó sin fantasmas. En 1998 quiso impulsar a su carta fuerte: José Antonio Estefan, pero se le atravesó Murat. Éste se montó en la amenaza de Ricardo Monreal de dejar al PRI si lo bateaban en la candidatura por Zacatecas. Y así llegó en 1998 a la gubernatura. Irrumpió como Atila, borrando toda huella de su odiado antecesor. En 2004, en la carrera por la sucesión, le dio cuerda a tres de sus alfiles: Juan Díaz Pimentel, Raúl Bolaños y Héctor Anuar Mafud. Atole con el dedo. Su carta fuerte siempre fue Ulises Ruiz, cercanísmo entonces a Roberto Madrazo. JMC quiso perpetuarse en el poder. Acaparó 3 dependencias. URO se lo sacudió y rompieron.
Con un PRI fracturado, los resabios del conflicto de 2006 y los enemigos de URO ligados a Murat trabajando a su favor, Gabino Cué llegó a la gubernatura en 2010, con una coalición de partidos: PRD-PAN-MC. Pero en 2016 se le enredó la pita para mantener la gubernatura. Tres de sus ex colaboradores: Salomón Jara, Benjamín Robles y José Antonio Estefan la buscaron. Los dos primeros eran ya sus declarados adversarios. La tríada fue por Morena, PT y PRD, respectivamente. Al no cuajar la candidatura única de la izquierda, Robles Montoya habría pulverizado el voto para favorecer al PRI y a Alejandro Murat. Éste ganó la gubernatura en 2016. (Continuará…)
BREVES DE LA GRILLA LOCAL:
— Para celebrar el Día del Empleado estatal, más que en los tiempos del PRI, el gobierno de la Primavera Oaxaqueña le dio al sindicato de burócratas el oro y el moro. Ausentismo laboral, torneos, comelitones, bailongos, bonos, regalos, medallas. Erogar más de 150 millones es una mentada de madre para tantas necesidades en el estado. La calenda multitudinaria del 15 de octubre –con sus 16 bandas de música- fue la expresión más vulgar de la frivolidad y el dispendio.